viernes, 30 de septiembre de 2011



John Scofield
A Go Go 
Verbe Records, 1998






La menor cantidad de elementos sonoros, sólo los suficientes para mantener el factor rítmico vivo. Esa parece ser la consigna de Scofield en este disco que es célebre por su calidad y por los musicos que conforman la banda: Medeski, Martin and Wood (conocidos como MMW en su proyecto de grupo). En A Go Go cada uno de los temas suena mucho a un esbozo, a brevísimos licks entrelazados. Y es que se trata, como nos ha enseñado el jazz desde sus más remotos orígenes, de utilizar pretextos para la improvisación. Sin embargo, en este caso no se trata sólo de improvisación, sino que hay otro protagonista: el pulso. El pulso como una fuerza sonora que somete al oyente y lo obliga a moverse de acuerdo con un patrón que subdivide el tiempo en fragmentos iguales. Pulso-impulso, lo que suele llamarse groove. ¿Qué otorga la tremenda vitalidad a grooves como los contenidos en los temas de A Go Go? ¿Qué lo diferencia del golpe perfecto de un metrónomo? La respuesta es sólo una hipótesis: 1) la oscilación: a diferencia de una máquina, el pulso rítmico de los humanos oscila. Si bien es necesario que permanezca una constante, siempre parece ocurrir un deslizamiento microscópico que establece una identificación con la misma condición del corazón, órgano del pulso por excelencia. 2) La síncopa, la posibilidad de acentuar el carácter de ese pulso que se expresa siempre de una manera binaria (arriba-abajo, abierto-cerrado, sonido-silencio, etc.) a través de subdivisiones simétricas y proporcionadas en el espacio intermedio que existe entre cada golpe que marca el ritmo... A Go Go de John Scofield puede verse como un bello ensayo sobre las posibilidades de lo mínimo, y las posibilidades del ritmo, del groove. Imprescindible.

John Scofield - Guitarra eléctrica, guitarra acústica, silbato
John Medeski - Organo, wurlitzer, clavinet, piano
Chris Wood - Contrabajo, bajo eléctrico
Billy Martin - Batería, pandero

jueves, 15 de septiembre de 2011



O'Funk'illo
2011






Bajo la mismísima tradición alucinógena circense de gurús como Parliament-Funkadelic, la agrupación sevillana O'Funk'illo regresa con nueva producción después de una separación que parecía definitiva; se trata de Sesión Golfa. El disco está en la misma tónica que los anteriores discos: el funk y soul son los lentes con los que se mira el mundo, y el mundo empieza en Andalucía y se extiende hasta los clubes under de las ciudades donde se toca heavy metal o grunge. Las letras son puro ritmo y feeling en la línea de James Brown y flow de MC de hiphop que también es bueno para cantar. Lo que suena siempre que se escucha a O'Funk'illo es como dicen los españoles, puro cachondeo. Además, como siempre, podemos apreciar el virtuosismo de Pepe Bao en el bajo eléctrico. La música de O'Funk'illo es como una caminata por una ciudad nueva en la que todo pinta bien para el futuro. Aunque no siempre sea así... pero en eso estriba la efectividad de la inocencia.


Snarky Puppy
Rope a Dope / Ryko, 2010






Un sonido potente pero ligero al mismo tiempo, muy en la tónica de la tradición funk mainstream es lo que suena en Tell you friends de la agrupación Snarky Puppy (una banda que parece ser una especie de fenómeno underground de músicos salidos de escuela). En cualquier caso, el disco es bueno e interesante. La música está cuidadosamente producida, llena de arreglos milimétricos; el sonido y la intención recuerdan mucho a los ensambles de Dave Wackl de los 90's, pero actualizados y con cosas añadidas. Un detalle curioso es que la grabación fue simultáneamente en estudio y en vivo (incluso con público, como si se tratara de un concierto privado). También hay que decir que en esta producción suenan al rededor de una docena de músicos, así que no se trata de un combo pequeño grooveando (¿punto extra?). El sello discográfico Rope a Dope tiene algunas cosas interesantes que deberemos revisar pronto. Escuchen y opinen ustedes mismos.

miércoles, 7 de septiembre de 2011




Jaga Jazzist
Ninja Tune, 2003






Resulta maravilloso que no pueda definirse como jazz o como rock la música que suena cuando la banda noruega Jaga Jazzist toca. Lo que nos encontramos en este album se parece mucho a una especie de drum and bass, o a una electrónica extraña, incluso algo como un rock progresivo ligero... pero definirlo así sería insuficiente. En todo caso Jaga Jazzist tendría que definirse más como un grupo electroacústico, no electrónico o tradicional. Y ¿qué decir de la instrumentación?: batería, bajo, guitarra, teclados, sintes, cuerdas, trombón, saxofón, trompeta, flauta, vibráfono (!?). El sonido es ligero, muy lírico, lleno de melodías que suben y bajan arpegiando acordes, la construcción de los temas parece como ajustada a un espacio muy reducido (metáfora inconclusa). Por otra parte, es interesante la definición minuciosa de la sonoridad para los sintetizadores, las baterías (que son acústicas y eléctricas), y la sección de alientos (en especial para el saxofón con el que en algunos casos se desarrolla un sonido más parecido a una flauta transversal de registro muy grave). Sobresale también la combinación de métricas irregulares en la construcción de los temas; ese groove es hipnótico. The Stix es el tercer LP del grupo. En los últimos años Jaga Jazzist ha producido nuevos trabajos, pero de ellos escribiremos en otra oportunidad.